Castillo que necesita renovación en el oeste de Francia

Castillo del siglo XVII a reformar, con una superficie habitable de aproximadamente 741 m², rodeado de un parque arbolado de 26 hectáreas y dependencias de unos 450 m². Este castillo de estilo Luis XIV se encuentra en una posición elevada y ofrece una vista panorámica de los alrededores. 

Descripción 

Este histórico castillo se encuentra en las afueras de un pueblo en la región de Deux-Sèvres, en la frontera con Touraine y Anjou. La ciudad de Thouars está a solo 8 km y Saumur a 30 km. Esta región, conocida como Thouarsais, fue un importante escenario durante la Guerra de los Cien Años y las Guerras de Religión. Originalmente habitada por los pictos, un pueblo celta, la propiedad tiene una imponente entrada a través de un camino rural bordeado de árboles. Detrás de los muros que la rodean, se extienden unos 741 m² de superficie habitable y 450 m² de dependencias. La finca cubre un total de 26 hectáreas, 22 de ellas de bosque y 4 hectáreas de praderas.

Interiores impresionantes con gran potencial de reforma 

Construido alrededor de 1640 por una acaudalada familia de Vendôme, dedicada a la recaudación de impuestos y a las leyes, este castillo de estilo Luis XIV sufrió algunos daños durante la Revolución Francesa de 1789. Fue ampliado en el siglo XIX para adaptarse a los gustos arquitectónicos de la época. El patio de honor ofrece una vista a una fachada simétrica de piedra caliza, flanqueada por dos alas con dependencias. En su interior, el castillo impresiona con un amplio vestíbulo de entrada, una majestuosa escalera de caracol finamente trabajada, un salón de recepción con techo francés que se abre a un jardín con terraza y chimenea, además de un elegante comedor con paneles de madera. En la planta baja también hay un pequeño salón y un dormitorio con baño privado. En el piso superior, se distribuyen siete dormitorios, cada uno con lavabo propio, mientras que los áticos ofrecen la posibilidad de ser convertidos.

Las dependencias incluyen, entre otras, una sala de caza con chimenea, una bodega abovedada, establos, un taller y dos pozos.

El castillo lleva deshabitado 20 años, por lo que es necesario acometer una reforma integral, especialmente en la estructura de la escalera, el sistema eléctrico, la calefacción y otras áreas interiores.